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Nuevo Nayarit, 9 de may. (Axis negocios) -- Independientemente de la coyuntura global y la incertidumbre que envuelve a la economía, los bancos en México visualizan el crecimiento de su negocio a partir de la proveeduría de crédito de consumo y productivo, este último uno de los sustentos del llamado Plan México para fortalecer el mercado interno.
En ese sentido, la Asociación de Bancos de México (ABM), el organismo que representa al gremio, acaba de firmar un acuerdo con el gobierno para aumentar la penetración del crédito hasta 30% en el segmento de pequeñas y medianas empresas.
El acuerdo sucede en la primera Convención Bancaria a la que acude Claudia Sheinbaum investida como presidenta de México, y también en un momento en que el gremio eligió a Emilio Romano (ER), quien viene del banco de inversión Bank of America México, como su nuevo presidente.
Romano tiene una experiencia amplia tanto en el sector público como en el sector privado, y aunque considera que el crecimiento económico es fundamental para la expansión del crédito, considera que existen oportunidades para avanzar en la bancarización de individuos y empresas en el sexenio actual.
El banquero conversó con Axis negocios sobre sus perspectivas del sector bancario, de la economía y del panorama internacional que enfrenta México.
¿Cómo pueden los bancos impulsar el crecimiento del crédito en una economía estancada y sin descuidar la calidad de activos?
ER: La propuesta que tiene la banca es ponernos de acuerdo con los distintos actores, ya sea el Gobierno, el sector privado, para poder penetrar todavía más en el crédito y en el ahorro para que podamos crecer en estos objetivos, a pesar de que la economía crezca o no crezca a la velocidad que esperamos.
Un tema muy importante es el incrementar la cantidad de pequeñas y medianas empresas que se mueven del mercado informal al mercado formal. Y ahí un dato, más o menos el universo de pequeñas y medianas empresas es como de cuatro y medio millones, de las cuales más o menos un millón están en el mercado formal y los otros tres millones están en el mercado informal, que no están cumpliendo sus obligaciones tanto laborales, fiscales y no están necesariamente en el universo bancarizado para efecto de prestarles.
El acuerdo con el Gobierno va en el sentido de podernos apoyar en todas estas necesidades de todos los temas que tenemos que hacer que funcionen para que esto se logre.
¿En qué horizonte de tiempo se podría llegar a 60% de transacciones digitales?
ER: Va a depender de qué tan rápido nos pongamos de acuerdo todos. Primero tenemos que poder incrementar la participación de los mexicanos en tener una cuenta de digital cuando cumplen 18 años, tenerla como un derecho humano, eso ya está, pero no están con todos los mexicanos. Por otro lado, viene el que tengan cobertura y un equipo celular para que puedan tener el acceso a la banca. Otro tema es eficientar los mecanismos de pago y cobro vía digital, los costos de cobro y pago vía digital. Otro es el poder pedirle al Gobierno Federal y a los principales proveedores de servicios y adquirientes que no permitan o que reduzcan la captación de efectivo.
Todo esto hace que este aparato digital quede ya registrado y por lo tanto, más y más empresas tengan contabilidad, tengan historial de crédito, muy importante, porque ya queda todo esto registrado en el Buró de Crédito. Tendrán más profundidad en su historial de pagos y por lo tanto, la banca les va a poder prestar más.
Esto lleva a un círculo virtuoso donde tienes más acreditados, puedes profundizar el volumen de créditos y también puedes trabajar conjuntamente en reducir costos.
Estamos en momentos de desaceleración de ganancias de la banca y búsqueda de proteger márgenes. ¿En qué sectores visualizan mayor crecimiento?
ER: Realmente en la banca los sectores que más van a demandar créditos son los que más crecen. Esa pregunta muchas veces el mismo mercado es muy eficiente en resolverla porque cuando alguien pide un crédito es porque tiene la seguridad de que hay una necesidad de crecer y hay una garantía o una seguridad de que vas a poder pagarlo.
Desde esa perspectiva, donde nosotros vemos mayor énfasis es toda la parte de la industria, toda la que está incorporada a la cadena productiva global y especialmente en Norteamérica, porque estamos convencidos que el nearshoring y todos los esquemas que se están presentando de aceleración en la integración regional en toda esta reasignación de cadenas globales va a continuar integrando a México hacia Norteamérica.
La segunda es toda la cadena de consumo y lo que lleva el consumo no sólo en las cadenas de abarrotes, sino también los que prestan bienes y servicios que se consumen de manera amplia, todos estos escenarios son porque en México se ha logrado aumentar el nivel adquisitivo de los mexicanos a través del aumento del salario mínimo por encima de la inflación y los apoyos sociales. También están los otros esquemas que el Plan México pone como prioritarios: semiconductores, minería, petroquímica, farmacéutica, textil y calzado.
Por último, la banca tiene muy claro que gran parte de lo del crecimiento del país se va a dar a través de la inversión en la infraestructura.
¿Confías en que las relaciones en Norteamérica, pese a la incertidumbre actual, se mantendrán en el largo plazo?
ER: Sin duda. Mi visión es que, en el largo plazo, es más, muy pronto vamos a poder tener mayor claridad en la forma en que se va a reestructurar la región. Ya vimos los elementos previos que son esta integración de Norteamérica y el rol que juega México es tan importante, yo diría, que es más importante tal vez para Estados Unidos y Canadá que para México, porque proveemos y somos un socio estratégico muy importante para poder manufacturar lo que requiere Norteamérica.
Vemos positivamente este rebalanceo a nivel global con una forma fortalecida de restablecimiento de la estructura regional de Norteamérica, en donde México siga jugando ese papel estratégico en Norteamérica y, de hecho, posiblemente una aceleración en ese proceso.
Viniendo de la banca de inversión ¿cómo van negocios como el de mercados, fiduciario y fusiones y adquisiciones?
ER: Yo te diría que los mercados de deuda los vemos muy ágiles. México como grado de inversión, es un país en el que tenemos realmente emisiones muy atractivas que estamos logrando en los mercados globales y también en los mercados mexicanos. El mercado de Cebures cada vez es más profundo con todo el ahorro que hay de las Afores y va a ser más profundo todavía. Toda la emisión de deuda en los mercados globales, como es México y otros países, la estamos viendo con mucha resiliencia ante la incertidumbre que existe hoy.
Por otro lado, el de fusiones y adquisiciones lo vemos sorpresivamente también resiliente. Está habiendo apetito por la apertura en el mercado, específicamente de energía donde a los participantes les queda claro que en México hay una necesidad muy grande de inversión para poder lograr los objetivos de nuestra presidenta y del Plan México de poder abastecer a México y anticiparnos a las necesidades de energía para los próximos años.
En el mercado de capitales sí tenemos mucho que hacer. Ha sido como lo hemos visto muy fluctuante por toda esta incertidumbre, que acaba con todo y no te deja tomar decisiones, a nivel global este mercado incierto, hace que las valuaciones y las acciones se comporten de manera muy volátil, y esperamos que haya mayor visibilidad pronto, que permita que haya otra vez mayor estabilidad, que se requiere la estabilidad y la certidumbre para que haya emisiones nuevas.
Los efectos de las tasas de interés ya se reflejan en desaceleración y caída de ganancias ¿Cuándo crees que se estabilicen los beneficios?
ER: En cuanto a las utilidades de los bancos, yo te diría primero, el acumulado de utilidades de la banca es un reflejo hoy de una banca sana, tenemos índices de capitalización muy sólidos, tenemos una banca que ha tenido una conducción muy responsable y eso hay que premiarlo y hay que agradecerlo porque no siempre estuvo así.
La banca presta en un momento y espera cobrar el crédito dentro de cuatro o cinco años y cuatro o diez años. Y si se descompone el escenario, pues ese crédito ya está dado. Entonces, también hay que ver las utilidades de los bancos de una manera más holística, como una acumulación de utilidades para amortizar las pérdidas futuras y pasadas, para que en el largo plazo la banca pueda tener una utilidad razonable para hacer frente a sus obligaciones y no perder su capital.
El compromiso que traigo por la ABM es garantizar que la banca está compitiendo de manera transparente y abierta, y desde esa perspectiva, bienvenidos a los nuevos competidores para traer nuevas ideas, nuevos mecanismos, mayor competitividad y forzar o hacer que la competencia se dé de mayor intensidad con los bancos existentes, siempre y cuando el piso esté parejo.
Ante las oportunidades que mencionas y la necesidad de llegar a acuerdos que señalas, ¿Qué expectativas tienes al frente de ABM?
ER: Yo no vengo a perder el tiempo, porque yo soy un activo participante del sistema bancario y además he tenido la oportunidad de estar en el sector público también. . . y ahora tengo el privilegio, el honor y la responsabilidad de llegar a este rol después de tantos años, ahora desde el sector privado.
¿Cómo le vamos a hacer ahora distinto? Yo lo que digo es mi rol, si es exitoso, es poder potenciar lo que funciona y hacerlo más, eliminar lo que no está funcionando de estas medidas y encontrar nuevas formas para no seguir haciendo lo mismo sin avanzar para poder llegar a estos objetivos. No son nuevos, tal vez la digitalización, pero fuera de ella, la inclusión financiera está, la seguridad, el Estado de Derecho, todos estos ya los teníamos, el penetrar más. ¿Por qué vamos a hacer las cosas distintas? No hay una fórmula secreta, es simplemente ejecución.
¿Qué elementos identificas que no están funcionando?
EM: Por ejemplo, yo te diría que no están funcionando los esquemas de pago y cobro en México para desincentivar el efectivo e incentivar el digital. Hoy por hoy, la economía mexicana tiene incentivos mayores a operar en efectivo y esos incentivos son perversos, son incentivos de no cumplimiento de obligaciones, no solamente fiscales, son incentivos de informalidad, de hacer las cosas a medias, el no institucionalizar, no crecer, son incentivos que son de corto plazo.
El tema fiscal yo creo que es una gran fuente de temor o de desconocimiento de la parte de regularización de las de las personas físicas y morales. El otro tema en el que nos vamos a dedicar de lleno es a poder trabajar conjuntamente para llevar la banca a la última milla.
Fecha de publicación: 09/05/2025
Etiquetas: Banca México financieras ABM entrevista Convención Bancaria perspectivas