Trump anuncia un nuevo acuerdo comercial con Reino Unido, el primero desde que instauró su política de aranceles. Foto Flickr/whitehouse
Trump anuncia un nuevo acuerdo comercial con Reino Unido, el primero desde que instauró su política de aranceles. Foto Flickr/whitehouse

8 de may. (Axis negocios) -- El presidente estadounidense Donald J. Trump presentó este jueves un acuerdo comercial con Reino Unido, el primero desde que instauró su nueva política de aranceles, mismo que describió como ‘completo e integral’ y que permitirá reducir las barreras para el intercambio de bienes entre ambas naciones.

     Trump dijo que el acuerdo beneficiará tanto a su país como a Reino Unido, aunque los términos finales del acuerdo siguen negociándose. Por su parte, el primer ministro británico Keir Starmer, quien transmitió un mensaje vía telefónica, aseguró que se trata de un ‘verdadero homenaje a la historia’.

     El acuerdo “abre un mercado enorme para nosotros”, dijo Trump a periodistas en la Casa Blanca y agregó que será particularmente benéfico para la agricultura y la manufactura estadounidenses.

     El mandatario también atribuyó el éxito de estas negociaciones a su decisión de ‘hacer estallar todo el sistema’, pues ello facilitó que se alcanzara un trato justo desde el punto de vista de los estadounidenses.

     Howard Lutnick, el secretario de Comercio de Estados Unidos, dijo que los exportadores del país podrán acceder a mercados como el de etanol y la carne de res en Reino Unido, lo que equivale a cinco mil millones de dólares adicionales en ingresos. A ello se sumarían seis mil millones de dólares por los aranceles que seguirán pagando los productos británicos.

     El Reino Unido, que es el sexto mayor socio comercial estadounidense, también accedió a importar más bienes de la Unión Americana, incluyendo aeronaves de la empresa Boeing.

     La economía británica enfrenta actualmente un arancel base de 10% para exportar a Estados Unidos, como la mayoría de los países del mundo, un impuesto que se mantendrá vigente a pesar del trato, aunque habrá excepciones para ciertos productos.

     Además, el gobierno estadounidense aceptó la importación de 100 mil autos desde territorio británico con una tarifa de solo 10%, una reducción frente a la tasa de 25% que se cobra a otras naciones por el comercio automotriz. Después de esa cifra pagarán el mismo arancel que todos.

     Estados Unidos mantuvo este impuesto a pesar de que registró un superávit comercial de 11 mil 900 millones de dólares con Reino Unido en 2024, de acuerdo con datos de Census Bureau.

     Otras cuotas, como las que se aplican al acero y el aluminio que ingresan a la Unión Americana, podrían reducirse de 25 a 10 o incluso 0% para el Reino Unido, aunque ello dependerá de cómo se desarrollen las negociaciones.

     Para algunos, el convenio podría beneficiar a ciertos sectores productivos británicos, pero no tendrá un impacto importante sobre el crecimiento económico, pues los aranceles que anunció Trump en marzo y abril solo reducirían el producto interno bruto de la nación europea en 0.1 o 0.2 puntos porcentuales.

     “El acuerdo comercial es más importante para algunos sectores de la economía británica que para la economía en su conjunto, y el sector automovilístico puede respirar tranquilo tras la reducción efectiva de los aranceles de 25 a 10%”, escribió Paul Dales, economista en jefe para Reino Unido de Capital Economics, en un reporte. “Los automóviles son el mayor producto de exportación del Reino Unido a Estados Unidos, representando 15% del total el año pasado”.

     El convenio también parece poco relevante para los norteamericanos, ya que importan casi nueve veces más bienes de la Unión Europea que del Reino Unido, aunque al menos abre la puerta a que se alcancen arreglos con otros socios para reducir las tensiones comerciales, dijo Holger Schmieding, economista en jefe del banco alemán Berenberg, citado por el diario The Wall Street Journal.

     Trump dijo que su administración está muy cerca de llegar a acuerdos con otros países y que tiene optimismo sobre el arranque de las conversaciones con funcionarios de China el fin de semana en Suiza.

     De hecho, Scott Bessent y Jamieson Greer, el secretario del Tesoro y el representante comercial de ese país, sostendrán las primeras reuniones con funcionarios económicos de China el sábado en Ginebra, con la intención de negociar el intercambio de aranceles entre ambos socios, los cuales ascienden a 145% para la nación asiática y a 125% para los norteamericanos.

     Trump dijo que espera ver una mayor apertura de China para alcanzar un trato, aunque no descartó que las tarifas actuales puedan reducirse tras las primeras conversaciones entre Washington y Beijing.

     A la par de este acercamiento con China, la administración Trump también deberá dialogar con la Unión Europea, quien advirtió que iniciará una disputa en la Organización Mundial de Comercio y que aplicará aranceles a más de 100 mil millones de dólares en exportaciones estadounidenses, si no se alcanza un trato para derogar la tarifa recíproca de 20% que Trump amenazó con imponer tras un periodo de negociaciones de 90 días.

     Pese a las críticas que enfrentó en el pasado, Trump volvió a ‘recomendar’ que los inversionistas compraran acciones de empresas estadounidenses, lo que hizo que los principales índices bursátiles cerraran al alza, aunque frenaron su avance al cierre de la sesión.

     Así, el Nasdaq Composite ganó 1%, mientras que el Standard & Poor’s 500 y el Dow Jones Industrial Average subieron 0.6% cada uno.

 

 


Fecha de publicación: 08/05/2025

Etiquetas: Trump EUA Reino Unido acuerdo comercial economia