GBM no ve un escenario de crisis ni para las bolsas ni para el peso pese a la volatilidad de semanas recientes. Foto GBM
GBM no ve un escenario de crisis ni para las bolsas ni para el peso pese a la volatilidad de semanas recientes. Foto GBM

12 de sep. (Axis negocios) -- Las bolsas de valores de México y el peso han sufrido una elevada volatilidad en las últimas semanas, con las reformas constitucionales impulsadas por el partido gobernante Movimiento Regeneración Nacional (Morena), particularmente la dirigida al Poder Judicial.

     A la par los mercados han ido incorporando otros temas, como las elecciones en Estados Unidos y la desaceleración económica tanto de México como del resto del mundo, de acuerdo con los expertos.

     Diversos actores del mercado, como los bancos de inversión Morgan Stanley y JP Morgan, o las calificadoras Fitch Ratings y Moody’s Ratings, han advertido sobre afectaciones al panorama de inversión en el país a partir de las reformas constitucionales y otras dificultades, como cuellos de botella para la llegada de inversiones.

    Pero para pese a ese panorama, Andrés Maza, director de inversiones de GBM, el escenario para el mercado accionario y la moneda mexicana, no es necesariamente pesimista. 

 

Tras las advertencias sobre el atractivo de invertir en México, ¿Cómo ver la incertidumbre que pesa sobre el peso y las bolsas mexicanas?

Andrés Maza (AM). Efectivamente, viéndolo particularmente en el corto plazo este año ha sido difícil para la bolsa, 2023 fue un muy buen año, este año hemos visto un regreso. No diferente a otros mercados, porque no todo obedece únicamente a razones internas a México.

Empezando por el peso, si bien hemos visto un desempeño volátil, un regreso muy relevante de la moneda, digamos que, a causa de una percepción de riesgo diferente a lo que venía esperando el mercado desde antes de las elecciones, vale la pena destacar también que el peso al final de cuentas venía de un nivel muy fuerte, se veía muy apreciado, había tenido una racha de mucho fortalecimiento, prácticamente desde la pandemia.

Y si bien creemos que parte de esa apreciación está perfectamente justificada, también al final de ese tiempo los niveles a los que llegó, desde nuestro punto de vista y de prácticamente el punto de vista de cualquier participante el mercado, especialistas nacionales e internacionales, hasta el propio Banco de México, sorprendía la fortaleza del peso, del tipo de cambio y desde ese punto de vista quizá también, la elección actuó más como un catalizador para regresar un poco esa sobreapreciación del peso y no necesariamente es que el 100% del movimiento lo podamos atribuir este al evento en sí, es decir, en GBM, por ejemplo, desde principios año nosotros tenemos un objetivo de cambio entre los dieciocho altos diecinueves.

Independientemente de no saber, obviamente, qué iba a pasar en las elecciones y de no haber previsto un escenario como el que se dio, que al final trajo un poco de nerviosismo a algunos inversionistas, mucho de ese regreso obedece a razones más fundamentales.

 

Dicho de otra forma, sin esta incertidumbre política, no continuaríamos con el peso debajo de 17 unidades.

AM. Exactamente, no sé en qué nivel estaríamos, pero lo que sí es que a principio de año si tú hubieras dicho a GBM ¿cómo ves el panorama del tipo de cambio o en qué nivel crees que va a terminar 2024? Hubiéramos pensado que debía haber una devaluación, de hecho, estuvimos equivocados durante varios meses porque el peso se siguió apreciando, pero tarde o temprano sabemos que era lo que iba a suceder. Creo que va a seguir habiendo volatilidad hacia adelante.

La volatilidad también obedece no sólo lo que está pasado en México, como te decía sino que también está el proceso electoral en Estados Unidos.

Se viene en 2026 la revisión al T-MEC, quién esté en la Casa Blanca seguramente será relevante en las discusiones que se tengan y eso es algo que nos afecta de forma indirecta.

Ahora la bolsa. La bolsa había sido mucho más resiliente, si bien vimos ese movimiento fuerte las elecciones, la bolsa realmente no tuvo una afectación tan fuerte. Quizá ciertos sectores puntuales tuvieron caídas más marcadas, como las empresas financieras, por especulaciones, porque realmente no hemos visto una señal puntual, una declaración firme, de que quizá pudiera haber un ajuste a los impuestos que van a pagar los bancos.

Otros sectores que más bien han sido defensivos, que se benefician un poco de que continúen los aumentos que hemos visto, por ejemplo, en el salario mínimo que ha tenido un crecimiento muy fuerte México y que beneficia a un sector grande de la población; los programas de apoyo del gobierno que van a seguir poniendo dinero en el bolsillo de las familias mexicanas, y que eso pues ayuda que el poder de gasto, de consumo, sea mayor y por lo mismo las empresas que tienen esta posición pues se benefician.

 

Sobre el peso ¿hay tormenta perfecta con la reducción de tasas y desaceleración económica, o en realidad la lenta disminución de tasas, la continuidad del diferencial y una economía que no está en crisis lo apoyan?

AM. Hay que darle su justa proporción. Las tasas van a bajar, sí, nuestra expectativa es que terminemos el año alrededor del 10.25%, es más bajo de donde llegamos a estar, claro, pero sigue siendo una tasa históricamente alta al menos tomando en cuenta las últimas dos décadas en México, es una tasa real además muy positiva y sigue siendo muy atractiva a final de cuentas para los inversionistas.

Durante 2025 probablemente sigan las bajas de tasas, pero creemos que ahí también al final de cuentas Banco México se beneficia en que pudiera ir acompañando a la Fed. Las expectativas de que la Fed había estado retrasando más esa normalización en su política monetaria y Banxico había tenido que dar un poco el primer paso ahí, es que ahora parece ser que probablemente esté actuando de manera más agresiva y eso va a dar espacio que el diferencial de tasas entre la mexicana y la de Estados Unidos se mantenga.

Efectivamente la desaceleración económica también pudiera ser otra fuente de riesgo. Lo que te diría también un poco siguiendo tu analogía, digamos que esta tormenta perfecta, es que creo que lo que había habido un poco en años pasados es una “tormenta perfecta” a favor del peso. Teníamos estas tasas muy altas y elevándose, en México la tasa que llegamos a tener en términos reales prácticamente fue de las más altas a nivel mundial por mucho tiempo, encima de eso han habido muy buenos datos en cuanto a remesas, crecimiento de exportaciones, está ahora todo el tema del nearshoring.

El peso-dólar es un par de los que más operan a nivel mundial y que muchas veces actúa también como válvula de riesgo ante cosas que ni siquiera son endógenas a México.

 

¿No estamos pasando de un escenario muy bueno a uno muy malo, si no de uno muy bueno a una especie de normalización?

AM. En parte es una normalización, tampoco quiero restarle importancia a que viene una desaceleración del crecimiento económico, eso es relevante, habrá que atenderse y ojalá regrese el crecimiento a ritmos más elevados que mucho nos hace falta aquí en México, que en Estados Unidos termine la incertidumbre política y económica, no quiero aminorar el impacto de estas cosas.

Pero es importante también darle su justa proporción y no decir ‘oye si ya bajaron las tasas entonces ¿quién sabe a dónde se va a ir la moneda?’, cuando comparativamente, con la historia reciente, vamos a seguir con la baja de tasas y niveles más del lado alto que del lado bajo.

 

En cuanto al nearshoring, que ven positivo ¿Lo ven afectado por la incertidumbre política?

AM. Siempre en momentos como esos, procesos electorales, nuevas políticas, cambio de administración, etcétera traen volatilidad a los mercados, pueden ser causas de incertidumbre. Yo creo que en la medida en que el nuevo gobierno vaya anunciando sus políticas y garantice un marco jurídico de inversión, que dé certidumbre a los inversionistas, que deje claro que México es un destino atractivo para su dinero, podremos seguir aprovechando esa tendencia.

 

Hablando de las bolsas de valores, ¿Qué pesa más del exterior, la elección de Estados Unidos o el tema de las tasas de interés y posible recesión?

AM. Ambos son relevantes. El tema político creo que al final, si bien es algo que hemos visto a lo largo de gobiernos demócratas, republicanos, más de centro, más extremos, es que la continuidad que hay en las instituciones, en las políticas, se va dando. Con la llegada de Trump la primera vez el mercado obviamente estuvo sumamente nervioso, estaba sobre la mesa la potencial cancelación del Tratado de Libre Comercio con nuestro principal socio comercial, había muchas razones para estar preocupados. Pero qué es lo que se vio, a final de cuentas, pues esa relación comercial conviene igual manera ambos países, el pragmatismo es lo que prevaleció y tuvimos un tratado nuevo, muy similar en condiciones al anterior y quizá hasta más actualizado en algunos puntos que valía la pena retomar.

Entonces gane uno u otro candidato, no descarto que haya volatilidad en el corto plazo, es lo que suele pasar, pero no estaría demasiado preocupado a que haya un impacto muy relevante que cambie esta dinámica para México de manera estructuralmente negativa.

El tema macroeconómico es un poco la misma cosa, vienen las crisis, creo que el covid es un gran ejemplo, porque fue una crisis profundísima, los mercados siempre se adelantan, y normalmente las recuperaciones en los mercados se dan, pues justamente, cuando el PIB ya está en el mínimo y en ese momento rebota.

Nosotros al final de cuentas en GBM, más allá de las previsiones que podamos tener de corto plazo y obviamente el hecho de que seguimos muy de cerca todos estos factores de los que estamos platicando, nuestro punto de vista al invertir siempre es el largo plazo.

 

¿Qué sectores son los que más les gustan a GBM dentro de esta dinámica?

AM. El sector de consumo, particularmente el básico, es muy defensivo por lo general de cara a una posible recesión económica y que además resulta muy beneficiado por este poder adquisitivo de un gran segmento de la población en México, creemos que hay buenas oportunidades y donde además hay empresas cotizando a valuaciones atractivas.

En el sector financiero, que fue uno de los más castigados, creemos que incluso haciendo ejercicios, incorporando una posible afectación en cuanto a la generación de utilidades de esas empresas, mucho está ya en los precios y por lo mismo creemos que hay oportunidades puntuales ahí.

En cuanto a buscar diversificación, el aprovechar mucho de estas empresas que como te platicaba están globalizadas, tienen gran parte de su negocio fuera de México. Eso te va a blindar de alguna manera de la volatilidad que pudiera seguir habiendo en el tipo de cambio e incluso te podría beneficiar. Hay empresas que son muy exportadoras y que generan muchos dólares en sus ingresos, pero que su base de producción está aquí en México, por lo que se benefician cuando el peso está más débil.

Hay empresas cuyo negocio está totalmente fuera, que genera 80% de sus ventas fuera de México, como puede ser Cuervo, que todo el tequila lo produce aquí pero su principal mercado es Estados Unidos; Chedraui, es un retailer, se beneficia de las dinámicas en México, pero además la mitad de su negocio está en Estados Unidos, por lo que está protegido en temas de tipo de cambio. GCC, cementera, que el 80% de sus ingresos son en Estados Un idos. Esa es una manera de invirtiendo en la bolsa mexicana obtener diversificación geográfica y de monedas en tu portafolio para tenerlo más balanceado y que no tengas todos los huevos en la misma canasta, todo en pesos o todo en dólares.

 

Ante advertencias de bancos de inversión y calificadoras ¿Ves riesgo en los próximos 12 meses de baja de calificación crediticia para México?

AM. Honestamente no tengo un view muy fuerte, de mucha convicción ahí. Creo que las calificadoras estarán haciendo su trabajo de revisar cuáles son las políticas de la nueva administración, porque siempre es importante que realmente se dé el cambio de gobierno y veamos exactamente qué es lo que se va a estar priorizando, procurando. Y van a estar atentas a lo que platicamos de las finanzas públicas.

Ahí la señal es ver cómo va a venir el presupuesto del próximo año, si se van a hacer los recortes difíciles que tienen que venir, cómo se va a también, de alguna manera, a compensar estos proyectos emblemáticos de la administración actual como el Tren Maya, la refinería, al aeropuerto, que más allá del impacto que puedan tener, lo que sí han tenido un impacto es en inversión en México y que se están terminando y esa inversión ya no va a estar, entonces cómo se va a recuperar la inversión  y la economía para que no se frene esa parte del crecimiento.

 


Fecha de publicación: 18/09/2024

Etiquetas: México bolsas peso inversiones volatilidad perspectivas entrevista GBM