La Junta de Gobierno de Banco de México confía en que la inflación retome su tendencia a la baja pronto, de acuerdo con la minuta de su última reunión. Foto archivo
La Junta de Gobierno de Banco de México confía en que la inflación retome su tendencia a la baja pronto, de acuerdo con la minuta de su última reunión. Foto archivo

22 de ago. (Axis negocios) -- Los integrantes de la Junta de Gobierno de Banco de México optaron por recortar la tasa de interés de referencia del país ante la expectativa de que las recientes presiones inflacionarias se van a disipar pronto y a pesar del debate acerca de los efectos que esta decisión tendría sobre su credibilidad.

     En la reunión del 8 de agosto, los subgobernadores Irene Espinosa y Jonathan Heath votaron en contra del recorte al considerar que podría ser prematuro y que afectaría la credibilidad de los pronósticos del banco sobre la trayectoria de la inflación, de acuerdo con la minuta de ese encuentro.

     No obstante, una mayoría encabezada por la gobernadora Victoria Rodríguez y por los subgobernadores Galia Borja y Omar Mejía votó a favor de una reducción de un cuarto de punto porcentual para dejar el interés objetivo en 10.75%, ante la expectativa de que la inflación retome pronto su tendencia a la baja.

     “Todos reconocieron que sus incrementos han obedecido exclusivamente al comportamiento creciente del componente no subyacente, ya que la inflación subyacente ha mantenido una tendencia descendente”, dijo Banco de México, en la minuta. “En este contexto, la mayoría argumentó que se están observando ajustes de precios relativos y no aumentos generalizados”.

     La Junta de Gobierno dejó abierta la puerta a nuevos recortes a la tasa objetivo del país, con base en el desvanecimiento esperado de algunos choques y como resultado del debilitamiento que se percibe en la economía.

     Este panorama podría incluso fortalecerse y hasta ganar más adeptos luego de que la inflación de la primera quincena de agosto descendió sorpresivamente y ayudó a que la tasa interanual tomara un respiro, después de mantenerse al alza por cinco meses consecutivos.

     Uno de los integrantes de la Junta, cuyo nombre no fue revelado, proyectó que “hacia adelante el entorno inflacionario permitirá seguir discutiendo ajustes en la tasa de referencia”, de acuerdo con la minuta. “No obstante, reconoció que tendrá que mantenerse un enfoque de gradualidad”.

     Frente a esta postura, la subgobernadora Espinosa pidió no ‘apresurar’ el ajuste monetario, ya que persiste un complejo panorama que incluso propició un incremento de los pronósticos para la trayectoria esperada de la inflación.

     El banco ahora proyecta que el índice de precios tendrá una variación promedio de 5.2% en el tercer trimestre y de 4.4% al cierre de año, frente a sus estimaciones previas de 4.5 y 4%, respectivamente. Los pronósticos para el componente subyacente, que tiene un desempeño menos volátil y ha reflejado de mejor forma el efecto de la política monetaria, son más optimistas. El banco aún cree que la inflación regresará a su meta puntual de 3% hacia finales de 2025.

     “Es imperativo mantener cautela y favorecer un enfoque de administración de riesgos, en beneficio de la credibilidad en este Instituto Central”, dijo Espinosa en el texto que acompañó a su voto disidente, incluido en la minuta. “Hacia delante, la volatilidad cambiaria podría exacerbarse por factores internos y externos. Ello obstaculizaría el proceso desinflacionario, aun ante la desaceleración prevista de la actividad económica”.

     Espinosa advirtió que la inflación subyacente está desacelerando a un ritmo cada vez más lento y podría contaminarse por el repunte que experimentaron las categorías más volátiles --sobre todo los agropecuarios-- en los últimos meses, un riesgo que “no es menor”.

     Por su parte, el subgobernador Heath incluso fue más lejos al señalar que los pronósticos del Instituto Central son optimistas y al afirmar que este movimiento de flexibilización pudiera ser interpretado como prematuro.

     “Nuestra trayectoria para la subyacente para los próximos ocho trimestres es sumamente optimista y carece de credibilidad”, dijo Heath como parte de su voto disidente. “Los datos actuales de inflación y sus expectativas de mediano plazo simplemente no sustentan esta decisión”.

     Sin embargo, Heath suavizó su postura la semana pasada y dijo que la autoridad monetaria tiene espacio para realizar uno o dos ajustes adicionales e inclusive está cerca de poder aplicar recortes más sistemáticos a las tasas, siempre y cuando el componente no subyacente baje como se espera y el subyacente rompa con la persistencia observada en los servicios.

     El consenso de analistas del sector privado coincide en que hay espacio para una mayor relajación, pues cree que la tasa objetivo bajará de nuevo en la reunión de septiembre y cerrará el año en 10.25%, frente a su proyección previa de 10.5%, de acuerdo con la encuesta quincenal de expectativas de Citibanamex. Ello aunque sus pronósticos de inflación son más pesimistas que los del Instituto Central.

     Si bien otro recorte de 25 puntos base el próximo mes parece ser el escenario base de la mayoría, algunos se muestran más cautelosos, pues tal movimiento corre el riesgo de revertir el progreso logrado hasta ahora para el control de los precios.

     “Consideramos que el panorama para la inflación continúa siendo retador”, escribió Alejandro Saldaña, economista en jefe de Ve por Más, en un reporte. “Ello, aunado al incremento en la volatilidad financiera, no justificaría que Banxico entre en un ciclo de continuos recortes en la tasa de referencia”.

     El banco anunciará su próxima decisión el 26 de septiembre.

 

 


Fecha de publicación: 22/08/2024

Etiquetas: Mexico Banxico economia politica monetaria recorte tasa Rodriguez Borja Espinosa Heath Mejia inflacion